El juego Plinko original se vio por primera vez en los años 80, por lo que es un proveedor de entretenimiento tradicional de larga data. Su modo de juego es simple y rápido: se lanza una bola sobre el tablero de clavijas y desciende hasta su base, alcanzando una casilla que corresponde al multiplicador de ganancias logrado por el jugador. Los premios varían según el número de líneas y el nivel de riesgo elegido por el jugador. Los multiplicadores de ganancias más bajos están en el centro y aumentan en los bordes, es decir, cada jugada genera un premio, sin embargo, la tasa de rendimiento puede ser inferior a 1x la apuesta. El jugador no tiene que esperar a que una bola llegue a la base del tablero para comenzar un nuevo movimiento, ¡lo que hace que el juego sea muy rápido y divertido!